Escolares japoneses no descansan ni en vacaciones

marzo 29, 2022

Estoy establecido en Japón y soy padre de una niña japonesa quien acaba de culminar la secundaria básica.

En lo que respecta a su experiencia estudiantil, si bien en general estoy muy satisfecho con el sistema educativo japonés, siempre he criticado el tiempo que demandan las actividades extracurriculares, más específicamente los clubes deportivos y musicales.

En este su último año, por ejemplo, a pesar de que el acto de graduación fue el 18 de marzo, la banda musical del colegio – donde mi hija toca trompeta – mantuvo su actividad diaria hasta el sábado 26, fecha de su presentación final.

Por un lado, valoro enormemente que en los tres años de la secundaria básica, gracias a la banda, mi hija haya aprendido a tocar trompeta, y más importante aun, que lo haya disfrutado (así como toda la familia disfrutó sus conciertos). Pero, por otro lado, siento que esa actividad mantuvo a mi hija demasiado ocupada. Ensayaba 4 días a la semana, más algunos sábados cuando se acercaban las presentaciones.

Valga acotar, que ella nunca se quejó, y que por el contario asistía muy ganosa a los ensayos, incluidos algunos sabatinos. Aun así, como su padre considero que sería más saludable para ella y demás alumnos, que dispusieran de más tiempo libre para otras actividades de su gusto, como pasatiempos y actividades recreativas tanto con la familia como con amigos.

Pero, eso no es todo. Lo que me hizo escribir este artículo fue que el nuevo colegio donde mi hija estudiará su secundaria superior ¡le asignó tareas escolares en vacaciones! Después de pasar los últimos meses estudiando sin descanso para el exigente examen de admisión (un gran porcentaje de alumnos, como mi hija, recibieron clases extras en institutos privados especializados. Ella lo hizo sólo por 3 meses, algunos niños lo hacen durante todo el 3er. año), encima tienen que estudiar en vacaciones de paso de grado. ¡Ni siquiera los 10 días de vacaciones pueden descansar!

Yo puedo entender – a regañadientes – que los estudiantes japoneses (y de otros países) tengan tareas vacacionales durante el año escolar. Pero no puedo entender, por más que trato, la razón de las asignaciones académicas durante las vacaciones de fin/inicio de curso. Seguramente, habrá una explicación (que pediré el día del acto de entrada, mediante una carta explicativa de mi descontento), pero de antemano sé que no estaré de acuerdo.

Un amigo japonés cercano, a quien le manifesté mi malestar por las tareas vacacionales, me dijo que era «para que los estudiantes no se olviden de los estudios». Yo le repliqué: «¡precisamente para eso deberían ser las vacaciones de paso de grado, para que los estudiantes se olviden totalmente de los estudios!». Además, ¿cómo se van a olvidar de las materias, después de tantos meses estudiando como locos?

En definitiva, en eso de tener a los niños ocupados en actividades escolares varias – sobre todo, estudiando – a las autoridades educativas japonesas se les pasa la mano.